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Mi cuerpo Templo de Dios IV

 

Lucas 10.27

 

«Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con todo tu ser, con todas tus fuerzas y con toda tu mente»...

Satanás está haciendo hoy en día una estrategia para destruirte, y una de las mas sutiles es precisamente decir: <<Vida una, tallas muchas>> para esto ha despachado a una legión de sus soldados a buscar, encontrar y destruir, vendiéndote comida chatarra, para enfermarte de colesterol, triglicéridos, glucosa alta, porque el sabe que la vida esta en la Sangre y eso es lo primero que te envenena, una vez que filtró su veneno va matándote poco a poco, por eso se conoce como el enemigo silencioso.

 

Esta legión que Satanás ha enviado tiene su objetivo bien especifico. Su objetivo eres tú. Tu mente, tu corazón, tus órganos reproductores.

 

Tú llevas en tu cuerpo la capacidad de crear la amenaza más grande que Satanás conoce: Un siervo de Dios.

Satanás quiere pervertirte, quiere ensuciarte, quiere acabar con la posibilidad de que tu cuerpo sirva para traer un siervo de Dios a este mundo. Por eso te incita a que puedas ingerir cualquier cosa que destruya tu cuerpo, tu mente, tu visión, tus extremidades para que el templo que es de Dios, entre en ruinas.

 

Estamos consientes de que un día vamos a morir, pero si te mueres por algo que se podía haber evitado, tu familia, tus amigos y conocidos mas cercanos estarán verdaderamente defraudados porque no hiciste todo lo posible para estar aquí con ellos.

 

Tu cuerpo está hecho para glorificar a Dios. Tú eres el objetivo de los asesinos que Satanás ha enviado. No entregues tu cuerpo a deshonra. Piensa de lo que serás capaz en el futuro. Tú no sólo puedes arruinarle el presente a Satanás, también puedes arruinarle aún más su futuro.

 

Para que seas más que vencedor necesitas aferrarte a la victoria que Cristo realizó en la Cruz del Calvario por ti, pero también necesitas desarrollar elementos básicos, sencillos para alcanzar tus metas:

  • Fé: En el poder de la Sangre del Cordero y el Espíritu Santo para destruir toda mentira del enemigo.

  • Aliméntate: Recuerda que eres Templo de Dios, come Sanamente.

  • Ejercítate: Tu espíritu (oración), tu mente (lectura de la Palabra) y tu cuerpo (ejercicio físico).

  • Enfócate: En Dios, en tu Familia y en ti.

  • Congrégate: No lo dejes de hacer, ahí serás bendecido, restaurado y sanado.

 

Afirmación del día: Por mi Familia me levantaré para destruir las artimañas de Satanás. 

 

devocionaleselioenaiperez.blogspot.com  

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